La Realidad


Este mundo de formas tan perfectas está en mi mente-ego, éstas formas fueron fabricadas (imaginadas) por ella y no fueron creadas, simplemente porque sólo mi mente unificada crea. Fueron imaginadas tomando como referencia la verdadera Realidad. Así es como nos hemos convertido en constructores de mundos, por supuesto todos imaginados. Mientras nos creamos seres separados (o lo que es lo mismo: mientras escuchemos a nuestra mente-ego en vez de a nuestra mente unificada lo único que percibiremos será una realidad ilusoria y no nuestra auténtica Realidad donde sí Somos creadores).

En mi mente soñadora, las imágenes de mis sueños provienen de lo que yo creo es la realidad del mundo y esas imágenes a veces se transforman en algo que parece distinto a lo conocido pero solo lo parece. Nunca sueño algo distinto a lo que ya conozco, aunque no crea conocerlo sólo he borrado ese recuerdo de mi mente. Esta gran Película, nada tiene que ver con nuestra auténtica Realidad, y no lo digo porque La conozca sino porque donde sólo hay Amor no puede existir el dolor, el miedo y la muerte. Creo no recordar esa Realidad porque mi mente-ego no quiere que recuerde, pero la puedo observar en la perfección de la Naturaleza y de todo ser vivo, en el Amor entre los seres, en esa chispa de alegría que todos tienen guardada en sus corazones aparentemente separados. Debe ser una Realidad inconmensurablemente radiante, luminosa y perfecta, porque todo sueño sólo muestra una pequeñísima parte de lo conocido. Y, lo más importante, esa Realidad es Espíritu porque Dios solo crea en Espíritu, y Su Hijo solo crea en Espíritu por ser parte de Él.

Mi deseo es regresar a mi verdadera Realidad, DESPERTAR del sueño. No me conformo con ver una pequeñísima parte de donde provengo porque sé que en mi verdadera Realidad contemplaré mi creación. Por ser el Hijo de Dios mi creación es Perfecta y Eterna, porque así como mi Padre me creó, a Su imagen y semejanza, así creo yo a mi imagen y semejanza. De nada me sirve lamentarme de no poder recordar, necesito actuar en consecuencia, por mi y por toda mi creación. Recordaré eliminando de mi mente al ego. Mi mente no puede ser completa si una parte de ella está soñando un sueño donde no existe el Amor (en mayúsculas), donde existe la separación. 

La separación es simplemente separarse del Amor, si te ves distinto a cualquier ser o a cualquier persona te has separado del Amor, has visto diferencias donde es imposible que las haya. La Realidad no habla de separación sino de Unión. Es un sentimiento permanente en tu Corazón, es una Alegría Eterna. La Realidad nos pertenece por ser Quien Somos. Permanecer creyendo en quien no somos es renunciar a la Alegría Eterna por un substituto temporal que nada tiene que ver con la verdadera Felicidad. La Realidad nos llama, la Naturaleza, todo ser vivo, nos llama a recordar, a soltar toda creencia, todo juicio, y a entregarnos totalmente al Amor, lo que en verdad Somos.

Con Amor, y desde el Amor

SB


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